DAVID UZCÁTEGUI | Concejal de Baruta
Lunes 19 de Septiembre de 2011
Con
la fijación de la fecha para las elecciones presidenciales, se cierra un ciclo
más de incertidumbre. Otro entre tantos que ha vivido nuestra nación en la
última década. Y se cierra con una excelente noticia.
Sectores de oposición criticaban –no sin razón- la
ausencia de una fecha clara para el encuentro comicial. Señalaban que los
factores democráticos reunidos en la Mesa de la
Unidad estaban planificando y levantando cronogramas sobre una hipótesis. Nos
unimos a quienes pensaban que había que hacerlo así. No quedaba otra opción y
hay que pensar que esta actitud de quienes constituimos la alternativa de
poder, presionó al Consejo Nacional Electoral a cumplir con su rol
institucional.
Quienes temían con lógicos fundamentos alguna sorpresa
desagradable con una manipulación de la fecha, pueden quedarse tranquilos.
Ciertamente el día de la contienda se adelantó; pero se hizo dentro de los
marcos legales y es perfectamente compatible con el cronograma de la MUD, el cual
queda intacto.
Seguimos pensando que las intenciones de unos cuantos
entre quienes detentan el poder actualmente, no son para nada buenas; pero
también existen otros tantos apegados a la norma democrática, al igual que la
gran mayoría de los venezolanos, entre quienes se cuentan chavistas y
opositores.
En este marco abrumadoramente democrático, quienes
tengan intenciones distintas no pueden menos que esconder con vergüenza sus
apetencias. Sí creemos que hubo una maniobra política en el cambio de fecha; pero
dicha maniobra no pudo ir más allá de lo que permite la ley.
El adelanto de la fecha sin duda busca favorecer al
gobierno. Atajar la caída de su popularidad, celebrar los comicios antes que
las cosas estén peores, incluso acortar la campaña de cara a un
candidato-presidente menguado en sus fuerzas físicas, que ya no es el mismo de
2006. Pero no se pudo hacer mucho más. Las elecciones van y van dentro de los
lapsos previstos.
Del lado de las fuerzas democráticas alternativas, se
ha convalidado el día propuesto por el CNE. Las primarias quedan en la fecha
prevista y por consenso se declaró que el tiempo para la campaña presidencial
será suficiente; sin dejar de estar conscientes del enorme esfuerzo que
significará una vez más enfrentar a un contendor ventajista, que distrae fondos
del Estado para propaganda y que abusa de cadenas
radiotelevisivas para imponer su parcialidad y difamar al contrario. Pero en
esas circunstancias hemos ganado dos de las últimas tres elecciones. Ni
siquiera el más radical oficialismo se atreve a cruzar cierta raya amarilla que
es indeleble en el inconsciente colectivo venezolano.
En cuanto al lapso entre la selecciones y la toma de
posesión del nuevo gobierno, es cierto que ahora aumenta y que esto provoca
suspicacias bastante bien fundamentadas. Pero también sobre ello trabaja la
MUD, proponiendo parámetros para lo que antes se conocía como una “comisión de
enlace” entre el gobierno saliente y el entrante. Será necesario trabajar mano
a mano con el chavismo democrático en tan delicada tarea, ya que nos
enfrentaremos a una ocasión histórica: 2013 se perfila como el primer cambio de
gobierno en Venezuela en 14 años. Solamente el
gomecismo estuvo mayor tiempo en el poder.
En la colectividad nacional se siente un entusiasmo
que era necesario y que ya había sido olvidado. Se habla de transición, de
propuestas, de una nueva forma de conducir al país hacia un futuro pacífico y
próspero. Pero no se trata solamente de hablar, sino de la certeza que se le
imprime a esas palabras. Es posible, suena real y próximo.
*Presidente del Concejo Municipal de Baruta
*Twitter: DavidUzcategui